Ánimo y enojo

Para Benjamín que siempre está por ahí.

Pues después del la tristeza me viene el enojo, dice la Rochester que es porque a lo mejor estoy menopáusica, ojalá fuera por eso, pero sé porqué es.

Soy nueva en este asunto de los blogs, le entré por un compromiso conmigo misma, para obligarme a escribir aunque no puedo negar que me agrada que me respondan, es como si un náufrago recibiera de regreso el mensaje que lanzó al mar en una botella. Recibir respuesta es saber que no estás solo, que alguien está por ahí y aunque no te rescate de tu isla desierta, el saberlo cerca te anima.

De luto

No hay entradas, estoy de luto, estoy viuda deshijada, desamigada, desamorada. Ya que pase el novenario.

Al son que me toquen bailo, no le aunque que sea güera

El son de la negra
Negrita de mis pesares, ojos de papel volando, a todos diles que sí, pero no les digas cuándo, así me dijiste a mí por eso vivo penando.
(Son jalisciense)

Ay!!!

Me lamento, lloro, sufro, pero me río y me levanto.

Ay!!!
Me duele aprender, me duele seguir aprendiendo, yo tan crítica y autocrítica, ¿seguiré cayendo en el autoengaño?

Ay!!!
Que desgarrador es soltar, entender, darte cuenta de que haces mal, saber lo que haces bien y que no le importe a nadie solo a ti mismo.
Pero ay, ay ay, Jalisco no te rajes!!! Porque Jalisco nunca pierde y cuando pierde…
…arrebata.

Así que como buena tapatía (y mocha que está de moda):
Si ya me puso Dios en este camino…
Dirán que soy cobarde si me desvío.
O lo que es lo mismo: Si ya me puso Dios en este camino, dirán que soy culera si me quito. (Perdonen mi español, estoy enojadilla)
Y para rematar, como dijo Ibargüengoitia: “Dios quiso que fuera desgraciada, pero no me dio la gana”.

De gringas renegadas y redimidas

Pues sí, lo confieso soy gringa, lo he ocultado durante mucho tiempo, lo he ocultado porque crecí inmersa en una generación anti-yanqui, anti imperialista, Marxista, Fidelista, Allendista, Comunista, Socialista, Cheguevarista, indigenista.
Crecí amando México, como mi tierra y en formación soy mexicanísima, rancherita de Arandas, güerita . ¡Qué remedio!
Oculta siempre, queriendo pertenecer a… la preocupación, la desilusión, la recuperación de la identidad.
Ahora no me oculto, soy la rancherita de Arandas, la gringa de LA, la irlandesa de mi padre. Conversando con mi amigo Gabriel, regiomontano, coincidimos en las cosas ricas de USA de las que me siento orgullosa , ya no oculta: Paul Auster, Woody Allen, Keroac, Hemingway, Carver, Faulkner, el jazz, Gershwin, Ella Fitzgerald, Duke Ellington, I got you under my skyn, Carly Simon, Marilyin, por supuesto no Manson, las aceitunas, cerezas y naranjas y la cantina de mis tías en Lindsay, California. Soy gringa ni modos, pero mexicana de corazón y acción.
Y ya entrada en gastos; ¡que viva el Atlas manque gane!